El Maillot Rojo
Mientras que los maillots amarillo y rosa en el Tour de Francia y el Giro de Italia ocupan un lugar secreto, en La Vuelta, el maillot del líder, el maillot rojo, no está tan bien considerado. No me malinterpretes, es igual de importante para los ciclistas y sus equipos. También es muy celebrado por los aficionados y la cultura que rodea a La Vuelta, pero el color no es más que una formalidad. El espíritu que hay detrás del maillot es lo más importante para los aficionados españoles.
Sin embargo, el maillot rojo se introdujo hace sólo 14 años en La Vuelta 2010. Antes de eso, el líder vestía todo tipo de colores. Al principio, en 1935, el ciclista con el mejor tiempo recibía el maillot naranja. Pero, por desgracia, La Vuelta empezó en un momento en que Europa en general y España en particular no estaban del todo estables. Tras sólo dos años, comenzó la Guerra Civil española. Después de que Franco tomara el poder, restableció la prueba ciclista en 1941, cuando se concedió al líder un maillot blanco durante una sola edición. Después de un año más, el evento se detuvo de nuevo debido a la Segunda Guerra Mundial. Regresó en 1945 y el ciclista más rápido volvió a recibir un maillot naranja. Otros cinco años y la carrera sufrió otro revés. No encontraba patrocinadores.
En 1955, tras 5 años sin La Vuelta, la Vuelta a España regresó gracias a un periódico vasco. Siguieron el camino asfaltado que ofrecía el Tour de Francia y renovaron el maillot de la CG utilizando el famoso maillot amarillo. Gracias a los franceses, era bastante reconocible incluso entre los españoles, así que siguió siendo el maillot oficial de la CG hasta 1999 (con una notable excepción naranja en 1977).
Después, el maillot pasó a ser dorado durante unos 10 años, hasta que Carrefour intervino en 2010, y así nació el maillot rojo. Y, sinceramente, este color es sin duda el más español de todos. Ahora representa más que una marca, es un símbolo del ciclismo español. Así que, esperemos que perdure. Pero, por desgracia, por ahora no es de extrañar que el maillot rojo no sea tan popular como la maglia rosa o el maillot amarillo.
El jersey de la montaña
El maillot amarillo, que La Vuelta utilizó entre 1955 y 1999, no fue el único maillot que tomó prestado del Tour de Francia. Como homenaje al Tour de Francia, también añadieron un maillot de lunares. Las razones eran las mismas que en el Tour. Era fácilmente reconocible en las etapas de montaña. Sin embargo, a diferencia de los lunares franceses, los españoles son azules. Nadie sabe muy bien por qué se ha optado por el azul, pero lo más probable es que el patrocinador tenga algo que ver. La competición del Rey de la Montaña está patrocinada por Loterías y Apuestas del Estado. Los colores de la lotería son azules. Por lo tanto, independientemente de por qué los puntos siguieron siendo azules, Loterías y Apuestas del Estado estaba contento con el diseño y se mantuvo desde que se introdujo la competición del Rey de la Montaña.
El maillot de la regularidad
El maillot verde es otro símbolo que rinde homenaje al Tour de Francia. Sin embargo, a diferencia del Tour, el Maillot Verde Škoda no siempre se entregaba al mejor sprinter. Hace años, los puntos en La Vuelta se otorgaban de forma algo diferente. Se daban los mismo puntos en todas las etapas – y como muchas etapas terminan en cimas, el Rey de la Montaña a menudo también lleva el Maillot Verde. El sprint intermedio aportaba sólo 4 puntos al primer corredor y sólo tres competidores obtenían puntos. En cambio, en la línea de meta, el ganador se llevaba 25 puntos y los 15 primeros corredores obtienen algunos puntos.
En los últimos años se cambió el modelo a uno idéntico al del Tour de Francia y los últimos maillots verde suelen ser velocistas.
Maillot del mejor joven
A diferencia de otros eventos en los que el maillot blanco representaba al mejor corredor joven, en el pasado, este color representaba al líder de la combinada. Se otorgaba al corredor que tenía la mejor posición en tres categorías. Por ejemplo, el líder del maillot blanco podría haber sido 3º en la general, 7º en la clasificación por puntos y 5º en la prueba del Rey de la Montaña. Entonces, su puntuación habría sido 15, y mientras otros corredores tuvieran puntuaciones más altas, el líder de la clasificación combinada conservaría el maillot blanco. De esta forma, se pasó de ganar maillots a ganar etapas en todos los aspectos de la carrera.
Desde 2019, el maillot blanco de La Vuelta a España ha sido reasignado y ahora se otorga al mejor ciclista joven de la carrera. El maillot blanco se otorga al ciclista mejor clasificado en la Clasificación General que tenga menos de 26 años. El cambio alinea La Vuelta con otras Grandes Vueltas, donde el Maillot Blanco tradicionalmente significa el mejor corredor joven. La clasificación combinada que antes representaba el maillot blanco se ha suprimido, y se ha vuelto a centrar la atención en las clasificaciones individuales tradicionales.
Tei Tei
Los maillots son todos interesantes, con sus reglas específicas, pero nada dice tanto de La Vuelta como Tei Tei. Este toro es la mascota oficial de La Vuelta y la personificación de la carrera y su espíritu. También rinde homenaje a la cultura española y a su larga tradición taurina.
También se corresponde bastante bien con el maillot rojo, ya que se sabe que los toros embisten cuando ven un color rojo. Así que siempre estamos esperando que Tei Tei empiece a perseguir el maillot rojo. Pero por ahora, el toro de felpa es bastante tranquilo. Merodea entre los aficionados, baila y ayuda a La Vuelta a difundir la alegría a través de merchandising, juegos o haciéndose fotos con los alborozados aficionados.
En la actualidad, se puede ver a Tei Tei en todas las etapas, a menudo mezclándose con el público, bailando y compartiendo merchandising. Y quién sabe, tal vez algún día persiga el maillot rojo.
El Trofeo
Por último, tenemos el trofeo, y vaya si los españoles se lo han currado. Cada año, el ganador recibe una placa de cristal producida por la renombrada Real Fábrica de Cristales de la Granja, una fábrica de cristal fundada en 1727 por Felipe V de España.
El trofeo se elabora con cristal de alta calidad e incorpora elementos de España, del ciclismo y, por supuesto, de la marca La Vuelta. Estos detalles son únicos cada año, por lo que cada ganador se lleva un trozo de historia.
Como todo lo relacionado con La Vuelta, este símbolo también es relativamente nuevo, ya que el primer Trofeo La Granja se concedió en 2008. Sin embargo, es de esperar que esta bella muestra de maestría vidriera se convierta en uno de los símbolos fundamentales de La Vuelta.
