Iguala los 560 km de autonomía del Škoda Elroq y gana un portabicicletas

Escrito por Frantiska Blazkova

¿Aceptas el reto y entras en nuestro Club de los 560 km? Con motivo del lanzamiento del nuevo Škoda Elroq 100% eléctrico, lanzamos un concurso y una llamada a todos los ciclistas que puedan necesitar ese pequeño empujón especial para aumentar sus números esta temporada de otoño e invierno.

Las reglas no pueden ser más fáciles: Aquí te las explicamos

– Completa 560 km desde hoy hasta el 31 de diciembre de 2024 – sólo cuentan las salidas registradas a partir del 24 de octubre.
– ¡Guarda los tracks! Sigue tu progreso a través de las aplicaciones Strava, Garmin o Wahoo Fitness.
– Una vez que hayas completado los 560 km (o más), publica una captura de pantalla de la sección Progreso de cualquiera de estas aplicaciones en tu Historia de Instagram, etiqueta a @wlcmagazine y utiliza el hashtag #560kmClub.
– Al completar todo lo anterior, ¡entrarás automáticamente en el sorteo de un portabicicletas de enganche para 2 bicicletas!
– No olvides compartir tus logros para inspirar a otros.

Con lo esencial explicado, añadamos algunos detalles. ¿Por qué un número tan concreto como 560? Škoda, socio y patrocinador del Tour de Francia, La Vuelta a España, L’Étape du Tour de France y muchas otras carreras ciclistas de renombre mundial, lanza un nuevo modelo Elroq totalmente eléctrico que puede recorrer con una sola carga -lo has adivinado- 560 km. El objetivo es igualarlo o superarlo. Puedes hacer los 560 kilómetros de una sola vez o hacer otros más cortos que se vayan sumando, ambos planteamientos son válidos.

El premio, un robusto portabicicletas de remolque para 2 bicicletas, es compatible con cualquier modelo moderno de Škoda.

Después de que publiques la Historia de tu participación en el concurso, la incluiremos en las Historias Destacadas en el Instagram de We Love Cycling y el ganador será seleccionado al azar el primer día de 2025.

 

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Inspírate

La distancia de tres dígitos puede parecer desalentadora sobre el papel, pero tomemos como ejemplo al checo Milan Silný, cuyo planteamiento puede servir de inspiración a cualquiera que se plantee el reto de los 560 km. El ciclismo forma parte de la vida de Milan desde hace al menos 25 años. De los desplazamientos ocasionales y los viajes cortos, pasó poco a poco a las largas distancias de más de 300 km varias veces al año, acumulando resistencia. Entonces, un amigo le retó a probar algo diferente.

Viendo que Michal, de unos cincuenta años, tenía forma, resistencia y ganas, su amigo le propuso hacer más de 560 km en bicicleta de una sola vez. Juntos, se sentaron ante el mapa de los carriles bici de Europa, seleccionando una ruta que fuera adecuadamente llana, cómoda, pintoresca y no demasiado alejada de los servicios convenientes. Al final, Michal decidió emprender un viaje en bicicleta casi ininterrumpido de Alemania a Chequia, con el amigo que puso todo en marcha acompañándole en coche como apoyo.

Su viaje comenzó en el puerto de Wismar el 25 de septiembre de 2024 a las 9:41 y terminó un día y medio después en la plaza Hradčanské de Praga a las 22:08. Recorrió un total de 587,3 km. «Tenía la motivación de atravesar lugares preciosos que no había visitado antes, con el viento en la espalda y el sol en la cara. Por supuesto, estuvo lloviendo casi todo el tiempo, y de verdad que odio pedalear bajo la lluvia. Pero como era un reto, no estaba dispuesto a rendirme», ríe Milan.

Milan Silny
Un reto inspirador!

 

¿Y por qué el recorrido previsto de 560 km se amplió en casi 30 km? «Nuestro plan original incluía cruzar la cordillera de Krušné hory, en Chequia, pero al final decidimos rodearla por razones puramente prácticas, lo que añadió los kilómetros extra». Dado que Michal sólo hacía breves descansos entre kilómetro y kilómetro, uno se pregunta cómo luchó contra el sueño en las casi 36 horas de aventura. «En otoño, y sobre todo por la noche, si te sientas un minuto, el frío te despierta al instante y ya estás listo», bromea. A pesar de todo, Milan llegó a su destino sin mayores contratiempos.

Como se ve en el caso de Milan, el reto es muy factible si estás acostumbrado a montar en bici con cierta regularidad. Además, a diferencia de Milan, no tienes que hacer el viaje de una sola vez (a menos que quieras): lo que cuenta son los kilómetros totales registrados hasta el final del año.