¿Cómo saber cuando lubricar la cadena de la bicicleta?

Escrito por Jiri Kaloc

Es una pregunta habitual no sólo entre los ciclistas principiantes. No te preocupes si no conoces todas las señales que indican que una cadena necesita lubricación, basta con que lo hagas regularmente después de un determinado número de kilómetros. Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre el cuando lubricar la cadena de tu bicicleta.

¿Por qué hay que lubricar la cadena?

Podría parecer que lubricar una cadena de bicicleta no es muy importante. Funciona durante mucho tiempo aunque no la lubriques nunca. Entonces, ¿qué consigues si haces el esfuerzo de lubricar regularmente tu cadena?

Reducir la fricción hasta en un 50%. Una menor fricción significa que se gasta menos energía pedaleando, lo que le permite rodar más rápido con menos esfuerzo. En los niveles más altos del ciclismo de competición, incluso una pequeña reducción de la fricción puede suponer una mejora significativa del rendimiento.

Duplica la vida útil de tu cadena. Sin una lubricación adecuada, es probable que una cadena de bicicleta sólo dure la mitad de lo que podría durar con un mantenimiento regular adecuado. Por término medio, una cadena sin lubricar puede necesitar ser sustituida cada 2.500 km, mientras que una lubricada puede durar más de 5.000 km, dependiendo de las condiciones de conducción.

Hacer que tu cadena dure el doble significa que sólo tendrá que comprar la mitad de cadenas nuevas. Además, su uso de la bicicleta es aún más respetuoso con el medio ambiente al generar menos residuos.

Bicycle chain
La cadena es la línea de vida de tu bicicleta, transmite la potencia de tus músculos a la transmisión


6 señales que te dicen que hay que lubricar la cadena

Ahora que tienes la motivación para lubricar la cadena de tu bicicleta, ¿cómo saber cuándo hacerlo? Puede juzgar mucho observando y escuchando su cadena. Aquí tienes las 5 señales más importantes que debes conocer.

Falta de brillo: Una cadena bien lubricada tiene un brillo sutil debido a la ligera capa de lubricante. Si la cadena parece completamente mate o seca, es la primera señal de que es hora de lubricarla.

Acumulación de suciedad: Una cadena apelmazada con suciedad y arenilla no sólo está sucia, sino que también es probable que esté seca por debajo. La lubricación ayuda a prevenir esta acumulación creando una barrera que repele estas partículas.

Corrosión: Si observas óxido o un aspecto corroído en la cadena, es una clara señal de que el lubricante se ha gastado por completo hace tiempo y la humedad ha empezado a afectar al metal.

Chirridos: Uno de los signos más evidentes de que una cadena necesita lubricación es un chirrido persistente al pedalear. Este ruido se debe al contacto de metal con metal en los eslabones de la cadena.

Dificultad para cambiar de marcha: Si tienes problemas para cambiar de marcha con suavidad, puede ser señal de que tu cadena está seca. Una lubricación adecuada facilita el movimiento suave de los engranajes.

Eslabones rígidos: Una cadena rígida o con eslabones que no se mueven libremente carece de lubricación. Esta rigidez puede afectar al rendimiento general de la bicicleta, haciendo que el pedaleo resulte más duro de lo que debería.

¿Qué lubricante utilizar?

Existen tres tipos básicos de lubricantes para cadenas. Si practicas ciclismo en condiciones húmedas y fangosas, utiliza un lubricante húmedo. Es más espeso y se adhiere mejor a la cadena, protegiéndola de la humedad y el óxido. Para entornos secos y polvorientos, utiliza un lubricante seco. Es más ligero y no atraerá tanta suciedad, manteniendo la cadena más limpia. Si montas en bicicleta en condiciones muy variadas o si eres principiante en el mantenimiento de bicicletas, también existe un lubricante multiusos que es una gran elección.

4 pasos para lubricar la cadena de forma efectiva

Limpiar la cadena: Antes de aplicar el lubricante nuevo, limpia la cadena para eliminar la suciedad y el lubricante viejo. Puedes utilizar un limpiador de cadenas específico o una simple solución de agua y jabón. Utiliza un cepillo o un trapo para frotar suavemente la cadena, asegurándote de llegar hasta entre los eslabones.
– Seca la cadena: Después de limpiarla, secala bien con un trapo limpio o déjala secar al aire. Aplicar lubricante a una cadena húmeda puede diluir el lubricante y reducir su eficacia.
Aplica el lubricante: Aplica el lubricante con moderación en cada eslabón de la cadena mientras gira lentamente los pedales hacia atrás. Esto garantiza una distribución uniforme.
– Dejalo reposar: Deja que el lubricante penetre en la cadena durante unos minutos. Este paso garantiza que el lubricante penetre en las partes internas de los eslabones de la cadena, proporcionando la máxima protección y eficacia. Utiliza un trapo limpio y seco para eliminar suavemente el exceso de lubricante y evitar que se adhiera suciedad.

Lubrica la cadena cada 200 km

Una respuesta precisa a la pregunta principal de este artículo depende de su frecuencia de entrenamiento, las condiciones y el tipo de lubricante utilizado. Sin embargo, como punto de partida general, debería lubricar la cadena de su bicicleta cada 200 km. Si tiene una bicicleta de carretera y circula en condiciones suaves, el lubricante puede durar incluso 300 km. En cambio, si montas en una bicicleta de montaña y las condiciones son húmedas o embarradas, es probable que necesites limpiarla y lubricarla mucho más a menudo, probablemente cada 150 km o incluso más a menudo.