El Tramadol ha estado en las conversaciones durante casi una década y muchos pidieron la prohibición de la AMA. Un estudio reciente ha demostrado que, en determinadas condiciones, puede mejorar la potencia de los ciclistas. Sin embargo, es muy peligroso ya que los usuarios regulares se enfrentan, además de a los efectos secundarios, también a la posibilidad de adicción.
“A la luz de los riesgos asociados a su uso en el ciclismo de competición, y de acuerdo con la decisión del Comité de Dirección de la UCI de junio de 2018, el Reglamento Médico de la UCI prohibirá el uso de Tramadol durante la competición”, dice la declaración de la UCI.
Las medidas preventivas entrarán en vigor el 1 de marzo de este año. Los controles se llevarán a cabo durante las competiciones, pero no como parte del clásico procedimiento antidopaje posterior a la competición. Se extraerá una pequeña cantidad de sangre de la yema del dedo del ciclista. Los resultados serán enviados al director médico de la UCI en menos de una semana.
Tanto los corredores como los equipos serán castigados en caso de un test positivo. La primera infracción será “sólo” con la descalificación de la carrera y una multa de 5.000 francos suizos. Un tercer delito dará lugar a una sanción de 9 meses. Si tres corredores de un equipo dan positivo en una prueba dentro de un año, todo el equipo será expulsado por un período de entre uno y doce meses.