Lesiones ciclistas – Las caídas

Escrito por Jiri Kaloc

El ciclismo es un deporte seguro y saludable. Pero hay muchas formas de lesionarse sobre la bicicleta. Empecemos esta serie con la causa más temible de lesión, una caída. Echemos un vistazo a las lesiones más comunes causadas por una caída, qué hacer si te ocurren y cómo prevenirlas.

Prevención

Lo mejor que puedes hacer respecto a las lesiones causadas por colisiones es chocar lo menos posible. No es posible eliminar por completo el riesgo, a menos que sólo quieras montar en tu rodillo. Pero hay algunas cosas que puedes hacer para aumentar tu seguridad en la carretera.

Manejo de la bicicleta: Desarrolla gradualmente y con seguridad tus habilidades de manejo de la bicicleta, especialmente en carreteras mojadas, grava y descensos pronunciados. Ajusta tu velocidad a las condiciones del momento.

Mantenimiento de la bicicleta: Realiza un mantenimiento regular y comprueba los frenos antes de cada salida.

Mantente previsible y visible: Cuando circules por carretera y entre el tráfico, lleva ropa de alta visibilidad y haz señales cuando cambies de dirección. Mantente alerta y no des por sentado que los conductores siempre te ven.

Auriculares: Si quieres escuchar música o podcasts en tus paseos, utiliza auriculares conductores que no bloqueen tu audición.

Caídas en carretera

Una colisión no tiene por qué significar un viaje al hospital. Muchos accidentes se producen a baja velocidad y no causan daños graves. Si usas pedales automáticos, sabes que no es imposible caerte a 0 km/h mientras esperas el semáforo en verde. Lo bueno es que la mayoría de estas pequeñas colisiones sólo provocan un tipo de lesión muy común: el rasponazo.

El rasponazo es una abrasión causada por el deslizamiento de la piel sobre el pavimento en una colisión. Puede ser leve o grave, dependiendo de la velocidad y la fuerza de la caída y del grado de contacto de la piel con la superficie. Puede ser bastante dolorosa, pero normalmente puedes levantarte y volver a casa por tu propio pie. El principal riesgo de este tipo de lesión es la infección debido a la herida abierta que puede contaminarse fácilmente. ¿Cómo tratar el rasponazo?

Limpiar: Limpia a fondo la zona afectada con agua y jabón suave para eliminar la suciedad y los objetos extraños. Aplica después una solución antiséptica para prevenir infecciones.

Cubrir: Coloca un vendaje estéril o un apósito antiadherente sobre la zona herida para mantenerla limpia y húmeda.

En los casos más graves de rasponazos en la carretera en los que esté afectada una gran parte del cuerpo, o si hay signos de infección, es importante buscar atención médica.

Contusiones y hematomas

Las colisiones que se producen a velocidades de moderadas a altas y en las que el ciclista golpea el suelo con un poco más de fuerza suelen dejar contusiones y hematomas. Suelen aparecer en las caderas, los muslos, los brazos y los hombros como consecuencia de una hemorragia bajo la piel.

Para tratar este tipo de lesiones en casa, aplica hielo en la zona afectada durante 10-15 minutos cada pocas horas para reducir la hinchazón y descansa y eleva la zona magullada cuando sea posible. Es importante considerar si se debe buscar atención médica. Hazlo si también tienes dolor e hinchazón intensos, amplitud de movimiento limitada, entumecimiento o hematomas en zonas vitales como el abdomen, el pecho o la espalda.

Fracturas

Las fracturas son la pesadilla de todo ciclista. Por desgracia, las fracturas óseas ocurren, sobre todo al caerse a alta velocidad. Algunas de las localizaciones más comunes de las fracturas ciclistas son la clavícula y la muñeca. Si sospechas que tienes una fractura, es crucial que busques atención médica inmediata. Un diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado son esenciales para garantizar el mejor resultado posible y minimizar las complicaciones a largo plazo. Intenta inmovilizar la zona afectada lo mejor que puedas hasta que estés en manos de personal médico.

Lesiones en la cabeza

No hay nada más grave que una lesión en la cabeza al caerse con la bici. Pueden ir desde conmociones cerebrales leves a traumatismos craneoencefálicos graves. Si te golpeas la cabeza durante una caída, busca atención médica, aunque te encuentres bien. Los síntomas de una conmoción cerebral pueden incluir mareos, náuseas, dolores de cabeza, confusión o incluso pérdida del conocimiento.

Golpearse la cabeza puede poner en peligro la vida incluso en choques a baja velocidad, si no llevas casco. Precisamente por eso, la mejor prevención es llevar casco cada vez que se sales en bicicleta. Si quieres el máximo nivel de protección, considera un casco con tecnología MIPS. MIPS, sistema de protección contra impactos multidireccionales, es una tecnología patentada diseñada para hacer frente a las fuerzas de rotación que pueden producirse durante ciertos tipos de impactos comunes en los accidentes de ciclismo.

Esperemos que nunca tengas que sufrir más que un leve rasponazo como consecuencia de un accidente de bicicleta. Pero incluso si ese es el caso, hay muchos otros tipos de lesiones que debe conocer como ciclista. Por suerte, hay muchas cosas que puedes hacer para prevenirlas. Más información en el próximo artículo.